Sanidad Ambiental - iones negativos - "Serotonina" -stress/agresividad- - tensión/ansiedad-

IONES Y SALUD, ESTUDIOS MÁS ESPECÍFICOS
Existía ya allá desde 1748 referencias sobre la influencia de la ionización ambiental sobre la naturaleza y los seres vivos. El Abad Nollet, un francés observó que las descargas eléctricas, es decir de electrones (E-) favorecían el desarrollo de las plantas.


La documentación científica actual es bastante abundante procedentes de estudios de diferentes países como Alemania, Italia, Rusia, Bélgica, Dinamarca, Israel, USA, etc. dónde existen desde hace décadas institutos especializados.


EL bacteriólogo americano Albert Krueger en sus estudios que realizó desde 1956 hasta más allá del 1970 demostró que un ambiente con Ionización Positiva favorecía el crecimiento microbiológico y que al contrario uno con Ionización Negativa tenía efectos bacteriostáticos, es decir neutralizaba su profileración. Una buena dosis de Iones Negativos reducía e incluso eliminaba la existencia de bacterias y virus en el aire.


Por el efecto electroestático los Iones Negativos hacían que las partículas de polvo dónde están adheridas dichas bacterias y virus se aglomeren y se precipiten al suelo al volverse demasiado pesado. Al no ser respirados las bacterias y virus, principales causantes de diversas afecciones respiratorias como la gripe, se reducía el nivel de afecciones y contagios.


En el University of Pennsylvania´s Graduate Hospital y en el Nothern Hospital de Filadelfia, el Dr Kornblueh( 1902-1973) y sus colaboradores experimentaron con el tratamiento de iones negativos con pacientes que padecían fiebre de heno y asma bronquial. El 63% de los pacientes presentaron desde alivio parcial hasta alivio total. Estudiando los patrones de ondas cerebrales, descubrió que los iones negativos calmaban el dolor severo drásticamente. Una vez sostuvo un ionizador en la nariz y boca de un obrero que había sido ingresado en el hospital con quemaduras de segundo grado causadas por un vapor en su espalda y piernas. En sólo unos minutos el dolor se había ido, la administración de morfina en estos casos habituales no fue necesaria. A partir de ese momento, todos los pacientes con quemaduras graves son colocados en cuartos sin ventanas y cargados de iones negativos. Los efectos analgésicos eliminaban el dolor normalmente a los 10 minutos.


Estos fueron sus palabras:"Los efectos desecadores se manifestaron rápidamente y se obtuvo una disminución de la exudación. Este resultado contribuye de manera apreciable a disminuir la cantidad de infecciones y la formación precoz de escaras. El olor pútrido extremadamente molesto en las grandes quemaduras es completamente neutralizado. La disminución de la cantidad de infecciones y un aumento rápido de la epitelización contribuyeron a disminuir la duración de la hospitalización así como los trasplantes cutáneos. El tratamiento por aeroionización debe ser efectuado lo antes posible."


Animados por el éxito de Kornblueh, dos discípulos suyos, Minehart y David probaron la aeroionización en el alivio del dolor profundo postoperatorio. Durante un periodo de prueba de ocho meses expusieron a 138 pacientes a iones negativos los dos primeros días después de la cirurgía. En 79 casos- el 57%- los iones negativos eliminaron el dolor drásticamente." Al principio -dijo Minehart- pensé que era brujería. Ahora estoy convencido de que es real y revolucionario."


El Dr Kornblueh presentaría los resultados en un congreso de Bioclimatología en Londres.


En sus estudios sobre Prevención de los trombo embolismos postoperatorios a través de la Aeroionización Negativa de los doctores E.Merimsky-del departamento de Urología del Hospital Universitario Ichilov de Tel Aviv-, Y.I: litmanovitch - especialista vascular en el Centro Médico Hahassah de Tel Aviv y uno de los mayores especialistas en Bioclimatología- y F.G. Sulman -jefe de Farmacología Aplicada en la universidad de Jerusalén y miembro de la Unidad de Bioclimatología del Centro Médico Rothschild- Hadassah-.demostraron la eficacia de la aeroionización negativa que disminuye los casos de trombo embolismo postoperatotorios en la unidad de cuidados intensivos tras cirurgía urológica mayor pudiendo reemplazar el uso de anticoagulantes después de las operaciones.


Para permitir una valoración clara del efecto antitrombólico decidieron que ninguno de los pacientes recibiera tratamiento con medicamentos anticoagulantes salvo si se iniciaba un proceso de embolia. De los 228 pacientes que pasaron su periodo postoperatorio expuestos a ionización aérea negativa sólo tuvo lugar un caso de tromboembolismo durante un periodo de observación de 28 meses( 0.4%) y una trombosis venosa profunda en una mujer de 67 años que había sufrido operaciones múltiples en su riñón derecho y había estado hospitalizada durante 67 días antes. Su trombosis fue ligera y duró solo unos días. En el grupo de 1.232 pacientes del resto de la unidad de cuidados intensivos que pasaron por habitaciones no ionizadas hubo 12 casos (1%) de tromboembolismo a los que aplicó un tratamiento normal, entonces sí, con anticoagulantes, tres de ellos murieron. El 1% de trombo embolismo postoperatorio era equivalente a la media en otros hospitales del país que no usaban como remedio de prevención la ionización aérea.


Hubo algunos casos excepcionales que fortalecían la necesidad de la aeroionización negativa en el entorno hospitalario y sobre todo en las UCI , UVI y quirófanos. Un de ellos es el de una mujer de 50 años que fue llevada a un cuarto normal después de una operación ginecológica y desarrolló una trombosis venosa profunda. Pues después de ser trasladada un cuarto ionizado, la trombosis disminuyó y a pesar de que fue sometida a otras operaciones no volvió a sufrir ningún otro tipo de complicaciones similares. Otro hombre de 68 años con una historia de embolia pulmonar recurrente en el pasado fue colocado en un "cuarto ionizado" y operado de próstata . No se produjo ninguna trombosis ni señal de embolia pulmonar.


Los autores de dichos estudios señalaron también que: "Nuestra investigación ha mostrado que la ionización aérea positiva provoca cambios neurohormonales, sobre todo descarga de serotonina que puede precipitar el trombo embolismo. Hemos extendido estos estudios al campo atmosférico, a las ondas electro-magnéticas, mostrando que estas afectan a la descarga de serotonina al igual que la ionizacíon positiva aérea. Así aparece que la ocurrencia epidémica de trombo embolismos en días de carga aérea eléctrica positiva tiene que ver con el tiempo atmosférico entrante. Es un fenómeno que puede evitarse por la colaboración entre cirurjanos y meteorólogos. En el sur de Alemania las operaciones no se llevan a cabo en días del Viento Foehn debido al riesgo de trombo embolismo causado por las ionizaciones positivas del mismo. "


Recientemente, un grupo de investigadores de la Universidad de Leeds en el Reino Unido presentó un informe sobre sus estudios en el Hospital Saint James en Leeds al National Health System en el se proponía la implantación de equipos ionizadores en todos los centros de salud de la red pública. El equipo dirigido por Clive Beggs, experimentaron durante 6 meses con la implantación de ionizadores en la unidad de cuidados intensivos del hospital. Los resultados fueron espectaculares y muy esperanzadores, los infecciones producidos por bacterias como el acinetobacter, una de las más dañinas existentes , se redujeron en más del 60%


Marian Diamond, profesora de Neuroanatomía en la universidad de Berkeley -California demostró y estableció que los Iones Negativos inhiben la sobreproducción de la neurohormona 5TH. Hidróxido-Troptamina, la Serotonina, que es la neurohormona que actúa sobre el sistema psico-nervioso. Un alto nivel de serotonina conduce inicialmente a un estado de excitación, hiperactividad y de euforia pero su alto nivel prolongado desemboca en agotamiento, cansancio, ansiedad y stress que provocan jaquecas ,migrañas y depresiones.


En su trabajo " Introducción a la Ionización " la Dra. Marfa del Carmen Santos, diplomada Sanidad Ambiental en España explica lo siguiente: "En el marco de la línea experimental, se están consiguiendo resultados de gran interés, en los tratamientos de las depresiones, las jaquecas, el stress y el insomnio. En todas estas alteraciones es común el síndrome de tensión y ansiedad, en cuyo desarrollo tiene un especial protagonismo la serotonina. Se trata de una neuro-hormona de influencia capital sobre el sistema psico-nervioso, hasta tal extremo que frecuentemente se le denomina "la hormona del humor". Toda personas con padecimientos pisco nerviosos similares a los expuestos anteriormente, presentan una elevada concentración de serotonina en la sangre. Esta hormona se segrega cuando el individuo está sometido a situaciones de tensión extrema o se desarrolla en un medio hostil y agresivo. La superación de las citadas alteraciones se logra con la disminución del nivel de serotonina en la sangre, lo que se consigue mediante la actuación de la enzima
Mono-amino-oxidasa (MAO) que destruye dicha hormona, efecto similar al conseguido por el Valium o cualquier otro tranquilizante.
Una de las acciones más destacadas de los iones negativos es su influencia en la liberación de la citada enzima (MAO) que, según se ha dicho, es la vía de eliminación de la serotonina. Pero el efecto de los iones negativos va más allá, pues se ha demostrado que su presencia inhibe la formación de serotonina. Se ha demostrado experimentalmente que toda persona que se mantenga en una atmósfera con predominio de iones negativos logra en sus primeros dos días la reducción del 25% en el nivel de serotonina en la sangre."


Actualmente, según estudios estadísticos se ha comprobado que el 25% de la población realmente se ve afectada por los niveles de iones positivos en el aire. Del resto, el 50% es afectado de forma considerable aunque el 25% no se muestre en ningún caso sensible


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