Cuando llega el otoño y las lluvias tras el verano, las larvas de este gran insecto se rompen. Todavía hace buena temperatura cuando en los parques de las ciudades -si bien prefieren habitar en la humedad de las coberturas de musgo viejo y los bosques abiertos- pueden verse estos torpes alados, levantando el vuelo con sus largas y finas patas a nuestro paso. Emergen por decenas de la hierba y llegan a causar un pavor por completo injustificado.
Uno de los motivos del miedo que despiertan estos insectos de apariencia intimidante, es la prolongación en punta del abdomen de las hembras, algo que a simple vista muchos confunden con un aguijón. Evidentemente no es un aguijón. No puede serlo, porque los dípteros no tienen aguijón; eso es cosa de los himenópteros (abejas y demás).
Tipulidae De Wikipedia, la enciclopedia libre
Tipula
Los tipúlidos (Tipulidae) son una familia de dípteros nematóceros del infraorden Tipulomorpha, conocidos comúnmente como típulas, o zancudos (a los mosquitos también se les llama zancudos). Los adultos son delgados, con patas muy largas y finas; pueden medir de 2 a 60 mm. de longitud (sin contar las patas) aunque las especies tropicales pueden ser aun más grandes.
Se han descrito por lo menos 4.256 especies de tipúlidos, la mayoría por el especialista Charles Paul Alexander. Tipulidae es una de las familias más grandes de dípteros.
Son insectos de apariencia delicada, delgados, de patas muy finas y largas. Suelen mantener las alas abiertas cuando están en reposo lo cual hace fácil ver los grandes halterios o balancines. De su cabeza, destacan los grandes ojos compuestos. Las piezas bucales son alargadas dándole un aspecto de hocico y no sirven para picar. En contraste con la mayoría de los dípteros no son buenos voladores y son fáciles de atrapar. También es fácil que pierdan alguna de sus delicadas patas en el momento de ser atrapados; esto tal vez les confiere alguna defensa en contra de predadores.[cita requerida].
Hay gran variación de tamaño; las de climas templados van de 2 a 60 mm. Algunas típulas de climas tropicales llegan a los 100 mm. También hay algunas especies muy pequeñas que se pueden confundir con mosquitos; la mayor diferencia es la forma en V de su tórax. A diferencia de los mosquitos no tienen piezas bucales adaptadas a picar y no se alimentan de sangre. Sus alas carecen de las escamas características de los verdaderos mosquitos.
El abdomen de las hembras es más voluminoso que el de los machos porque contiene huevos. Además el abdomen de la hembra termina en un ovipositor afinado que puede parecer un aguijón pero estos insectos no pican.
Las larvas tienen una cápsula cefálica característica y los segmentos abdominales a menudo tienen prolongaciones carnosas, casi como tentáculos, que rodean los espiráculos u orificios respiratorios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Agradecemos el comentario, puedes comunicarte por email: vtrezza@gmail.com